Llega un momento en que te das cuenta de que:
El mujeriego no es así por guapo ni porque sea muy “cool” en ocasiones es por inseguro, necesitado de atención.; incluso tal vez por temor a enfrentarse con la plenitud de no necesitar más que a una sola pareja que comparta sueños, vida y tiempo.
La gente es héroe ó víctima de sí misma pues cada quien crece y avanza en su camino o se autodestruye, al ritmo y tiempo en que decide hacerlo.
El miedo suele ser uno de los peores enemigos, tanto así que puede acabar con una vida de la forma más cruel: poco a poco y sin hacerlo de golpe.
El ser bueno no te hace tonto, ni el ser inteligente precisamente te hace bueno. Se debe empezar por ser bueno con uno mismo, de no hacerlo probablemente no se tendría la fuerza y estabilidad para serlo con alguien más.
Los placeres de la vida son fáciles de encontrar; consisten simplemente en vivir disfrutando cada etapa y situación. Siempre es posible encontrar una luz en cada noche. Y las noches obscuras favorecen mucho a la apreciación de esos destellos brillantes y luminosos.
Las expectivas son frágiles y a veces filosas, punzantes y dolorosas; en ocasiones resulta más fácil no crecerlas tanto.
El problema de las cimas es que suelen estar vacías pues hay quien cree que siempre hay una más alta a la cual llegar; hay por contrario otras tan bajas que se encuentran saturadas físicamente, aunque vacías en muchos otros aspectos…
La confianza en sí mismo suele desencadenar confianza hacia los demás y el mayor beneficio en ello resulta en la tranquilidad que esto genera.
La tranquilidad es una de las bases de la felicidad.
El amor existe en todo y todos, pero hay que querer desarrollarlo y de ser posible multiplicarlo.
Aún cuando las tendencias actuales de vida pudieran ser el tener una vida “rápida” , “light” y “llena” de distractores nada tendría de malo escoger llevarla diferente pues a veces lo rápido genera una muerte lenta casi imperceptible; aquello que sugerimos “light” pudiera estar carente de emoción y sin emoción no hay existencia; al “llenarnos” con distractores externos pudiera generar el vaciarnos internamente.
El compromiso no se obliga, se genera y se da de manera natural, por propia convicción y nada tiene de malo, pues si no podemos comprometernos con uno mismo, y si no elegimos un camino a seguir probablemente no lleguemos a ningún lado.
El dar vueltas en el mismo círculo podría ocasionar la creación de un hoyo. Entre más profundo se hace un hoyo más difícil es salir.
La humildad tiene que ver con el crecimiento y la madurez emocional.
La madurez no tiene que ver con la edad.
Los prejuicios y juicios los podría emitir alguien perfecto, pero hasta el momento no conozco a nadie perfecto y una persona perfecta posiblemente no estaría interesada en emitirlos.
Con el tiempo también conoces todo tipo de historias, mundos…gente que aún estando físicamente bien tienen “capacidades diferentes” pero emocionalmente hablando. Así como también gente que tiene esa locura que a ti te llena, te complementa y te hace feliz, solo hay que permanecer atento aunque sin búsqueda para agradecer su llegada.
Te das cuenta que la vida pone día a día oportunidades y sugiere caminos llenos de luz, que tu decides cuándo utilizar.
Llega ese momento también en el que entiendes que lo que no te da vida, inevitablemente te la quita y es curioso pero; justo hasta ese momento entonces empiezas realmente a vivir.